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Maresme Circular, la marca del Consorcio de Residuos del Maresme, da un paso más en su compromiso con la sostenibilidad y está trabajando en un proyecto para aprovechar las aguas residuales procedentes de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Mataró y utilizarlas en los procesos del Centro Integral de Valorización de Residuos del Maresme para ahorrar un 50 % el consumo de agua de boca.
En una primera fase, se prevé utilizar esta agua residual en los procesos de tratamiento de aires, biometanización y producción de agua ultrafiltrada de la planta de tratamiento mecánico-biológico, la que se encarga de la estabilización de la materia orgánica y la recuperación de materiales reciclables provenientes de la fracción resto –el contenedor gris–.
Estos tres procesos tienen un consumo anual de 20.000 m3 de agua y esta propuesta supondrá la reducción de un 20 % del consumo de agua de boca.
En una segunda fase se quiere utilizar las aguas residuales en la planta de valorización energética del Centro, estimando la reducción del consumo de agua de boca en 30.000 m3 anuales, es decir, una reducción de un 30% adicional.
El primer estadio del proyecto está a la espera de recibir las correspondientes autorizaciones de la Agencia Catalana del Agua, el organismo competente; mientras que la segunda fase se encuentra en estudio de viabilidad técnica y económica.
Situada en el polígono industrial Les Hortes, justo al lado del Centro Integral de Valorización de Residuos del Maresme, la estación depuradora desarrolla en su línea de agua un proceso biológico de doble etapa, como consecuencia de la incidencia de las aguas industriales y una línea de barros, con recirculación, espesantes, deshidratación y almacenamiento de los barros.
Las aguas tratadas se vierten al mar a través de un emisario submarino de 2.000 metros de longitud. El proyecto de Maresme Circular propone utilizar estas aguas en sus procesos antes de que sean vertidas al mar.
