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El proyecto de innovación generará 40.000 toneladas anuales de combustible con tecnología patentada de pirólisis a baja temperatura a partir de paja de maíz maíz y otros residuos agrícolas para generar energía térmica de uso industrial y de calefacción civil.
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La planta donde la ingeniería térmica vasca E&M Combustión, va a aportar su tecnología de combustión industrial, se ubica en la zona industrial de la localidad de Anyang, situada en el norte de la provincia china de Henan.
Esta aplicación industrial consistirá en la elaboración de combustible en pellets mediante un proceso de pirólisis continua a baja temperatura, que permitirá torrefactar los residuos de biomasa para convertirlos en combustible de carbón de biomasa en briquetas, con propiedades optimizadas de secado y compactación para su uso en combustión.
Así, el proceso de pirólisis de la paja de maíz y su posterior conversión en pellets estables favorece la cadena logística de energía sostenible a gran escala, facilitando su transporte y almacenamiento para fomentar su uso térmico. La instalación está dirigida a aportar una solución a problemas como la contaminación ambiental y la crisis energética.
El proyecto está alineado con la política china de prohibir la tradicional quema de paja en los campos de cultivo, ya que su economía se está desarrollando rápidamente y el consumo de energía aumenta día a día. Actualmente, la demanda anual de energía del país representa más del 20% del consumo total mundial. Aunque la energía fósil -principalmente petróleo, carbón y gas natural- tiene aún un papel importante en este país, se están dando grandes avances para su sustitución por combustibles más sostenibles.
