En la noche de ayer tuvo lugar la tradicional cena de gala del Congreso Nacional de la Recuperación y el Reciclado, durante la que se entregaron los premios “Una Vida Dedicada a la Recuperación” y “Madre Tierra”, las máximas distinciones que concede la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) a aquellas personas y empresas cuya trayectoria merece un reconocimiento por su labor en el sector y su defensa de un desarrollo sostenible.
En esta vigésima edición, el Premio Madre Tierra ha recaído en el Bureau of International Recycling (BIR). El galardón fue recogido por Susie Burrage, recientemente nombrada presidenta y la primera mujer que ostenta el cargo en los 75 años de historia del BIR, y por Arnaud Brunet, su director general.
“Concedemos nuestro Premio Madre Tierra al BIR para destacar su firme compromiso y defensa del medio ambiente y el reciclaje, así como su importante contribución a la difusión de los valores medioambientales en toda la sociedad”, ha manifestado Alicia García-Franco, directora general de FER.
"Estoy encantada de recibir este premio como uno de mis primeros actos oficiales como presidenta del BIR", ha comentado Burrage. "Soy una apasionada de los vínculos entre el reciclaje y el medio ambiente, y del compromiso de nuestra industria con la sostenibilidad –de hecho, fue fundamental en mi campaña para convertirme en Presidenta de BIR–; tenemos que decirle al mundo, de la forma más explícita y en voz alta, lo fundamental que es la industria internacional del reciclaje para la economía circular y la salud a largo plazo de nuestro planeta”, ha añadido.
“Premios como este no solo respaldan el trabajo que todos estamos haciendo, sino que nos impulsan a alcanzar mayores cotas, por lo que en nombre de todos en BIR agradezco de todo corazón a FER este increíble reconocimiento”, ha concluido Burrage.
Por último, el Premio Una Vida Dedicada a la Recuperación ha sido concedido a Andrés Olmedo, fundador de Reciclajes Olmedo, empresa familiar fundada en el año 1972 que actualmente está dirigida por su tercera generación. La compañía, ubicada en la localidad malagueña de Campanillas, ”se ha caracterizado por evolucionar continuamente para lograr la satisfacción de sus clientes y proveedores”, ha destacado FER. “Cuenta con unos inicios humildes y hoy en día dispone de las instalaciones, la logística y la tecnología adecuadas para ofrecer un servicio de calidad para el reciclaje de chatarras, metales y baterías de vehículos al final de su vida útil”.
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