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La orquesta de Ecoembes ha vuelto a llenar el Gran Teatro CaixaBank Príncipe Pío en una nueva edición de su concierto navideño, que se consolida como una cita destacada en el calendario cultural y social de Madrid. Representantes de la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura, la cantante Rozalén y el músico y lutier Abraham Cupeiro se han unido a los jóvenes músicos en una velada en la que los instrumentos reciclados y las segundas oportunidades han sido los grandes protagonistas. La recaudación se destinará íntegramente al proyecto social “La Música del Reciclaje” para seguir ofreciendo formación musical a niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad.
Rozalén, una de las artistas más queridas y respetadas del panorama musical español por su compromiso social y su forma de entender la música como herramienta de cambio, ha llenado el escenario de cercanía y emoción, generando una conexión inmediata con e
“La Música del Reciclaje”, el proyecto social de Ecoembes que ofrece formación musical a niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad a través de instrumentos elaborados con materiales reciclados, ha celebrado su tradicional concierto solidario de Navidad en el Gran Teatro CaixaBank Príncipe Pío, en Madrid.
Bajo el nombre “Lo invisible a los ojos”, los jóvenes integrantes de la orquesta han invitado a los asistentes a descubrir la belleza oculta en aquello que parece no tener valor. Además, el concierto ha vuelto a demostrar la gran acogida del proyecto entre el público madrileño. Prueba de ello es que las entradas se agotaron días antes de la celebración y el teatro ha registrado un lleno absoluto.
Bajo la dirección artística de Nacho García y con Sergio Peris-Mencheta, uno de los actores más polifacéticos de nuestro país y del extranjero, como narrador, el concierto ha ofrecido una puesta en escena muy cuidada. En ella, los jóvenes músicos han compartido protagonismo con representantes de la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura, su orquesta hermana de Paraguay y dos invitados muy especiales.
Rozalén, una de las artistas más queridas y respetadas del panorama musical español por su compromiso social y su forma de entender la música como herramienta de cambio, ha llenado el escenario de cercanía y emoción, generando una conexión inmediata con el público. Por su parte, Abraham Cupeiro, músico gallego, lutier, compositor y explorador sonoro, ha aportado al concierto una nueva dimensión.
A lo largo de la noche, la orquesta ha interpretado un repertorio muy variado, en el que han destacado temas como el vallenato ´La gota fría´ de Carlos Vives, la cumbia ´Colombia tierra querida´ de Juan Carlos Coronel y Lucho Bermúdez y ´El verano de Vivaldi´. El resultado ha sido un viaje musical lleno de matices, que ha puesto de manifiesto la capacidad del proyecto para unir diferentes estilos, bajo un mismo mensaje: las segundas oportunidades sí son posibles.
Fiel al espíritu con el que nació “La Música del Reciclaje”, todos los fondos recaudados con la venta de entradas se destinarán íntegramente al propio proyecto. El objetivo es mantener y ampliar la formación musical y el acompañamiento socioeducativo que reciben los niños y jóvenes que forman parte de la orquesta.
“Este concierto nos recuerda que la sostenibilidad también tiene que ver con las personas, con acompañar, educar y ofrecer nuevas oportunidades”, ha señalado Carolina Martín Ramos, responsable del proyecto en Ecoembes. “Cada instrumento que suena en esta orquesta demuestra que todo puede transformarse si se le da una segunda vida, y el apoyo que hemos sentido esta noche nos anima a seguir llegando a más niños y jóvenes”.
Desde que echó a andar en 2014, La Música del Reciclaje ha demostrado que la música puede ser una herramienta poderosa para transformar realidades y abrir nuevos caminos de futuro. A lo largo de estos años, decenas de menores procedentes de entornos vulnerables han encontrado en la orquesta un espacio seguro en el que desarrollar su talento artístico, reforzar su autoestima, aprender a trabajar en equipo y tomar conciencia del valor del esfuerzo y la constancia.
Los instrumentos que utilizan los músicos de la orquesta están fabricados a partir de materiales reciclados, lo que permite a los participantes comprender de forma tangible la importancia de la economía circular y el cuidado del medioambiente. De esta forma, el proyecto une educación ambiental, inclusión social y cultura en una misma iniciativa.
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