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Al Mada, un fondo de inversión privado que opera en el ámbito panafricano, y CNGR, líder mundial en la producción de materiales activos para baterías de iones de litio, anuncian la firma de un acuerdo de colaboración para la creación de una empresa conjunta con sede en Marruecos destinada a producir componentes de baterías para vehículos eléctricos.
Al Mada y CNGR tienen previsto desarrollar una base industrial con el fin de transformar los recursos nacionales naturales (en particular, cobalto, fosfato y manganeso) en componentes de baterías: precursores de materiales activos de cátodo (PCAM, por sus siglas en inglés) con tecnología NCM (níquel, cobalto, y manganeso), así como materiales activos de cátodo (CAM, por sus siglas en inglés) con tecnología LFP (litio, hierro y fosfato), una tecnología emergente de gran crecimiento que se utiliza en baterías de vehículos eléctricos. La base industrial incluirá unidades de reciclaje para recuperar y aportar valor a los metales y materiales extraídos de baterías usadas. Se ubicará en Jorf Lasfar, en la región marroquí de El Jadida.
Como primera medida, la recién creada empresa conjunta tiene previsto desarrollar unidades de producción de precursores de materiales activos NCM con una capacidad de 120 kt al año, unidades de producción de cátodos LFP con una capacidad de 60 kt al año y unidades de reciclaje para materiales de baterías con una capacidad de 30 kt al año. Esta producción marroquí, equivalente a 70 GWh y suficiente para proveer más de un millón de vehículos eléctricos al año, se destinará principalmente a la exportación con el fin de satisfacer la gran demanda de Europa y América.
La empresa conjunta y el grupo OCP mantienen negociaciones comerciales para la adquisición de productos de fosfato que satisfagan las necesidades del proyecto.
La localización estratégica de Jorf Lasfar le aporta una ventaja fundamental a esta base industrial, dado que, en definitiva, respalda la ambición de situar el proyecto al frente de la altamente competitiva industria mundial de las baterías.
Con una inversión total de más de 20.000 millones de dírhams marroquíes (unos 1.800 millones de euros), está previsto que la fase de construcción de la base industrial comience durante el año 2023, con el objetivo de realizar la primera producción de materiales de baterías en 2025.
